Hoy es un día de empezar a decir «hasta luego». No me gustan las despedidas porque a veces parece que sean para siempre y yo creo en el tiempo, tardarán más menos tiempo, pero volverán.
Miro atrás y veo todo lo que he ido haciendo hasta hoy. ¡Es una pasada! Lo mejor, es que lo he hecho porque he querido, porque me apetecía, porque lo decidí así y sin mirar a nadie. Es uno de los pasos hacia adelante que he dado, por eso no quiero despedirme de nada, quiero que todas las experiencias vividas sea eso experiencias, madurez y que me de cuenta de lo que soy capaz y de lo que puedo seguir mejorando.
Último día de gimnasio, spinning espectacular, disfruto como un enano y hago uno de los mejores esfuerzos con cabeza desde Navidad. Toco el sillín al final de la clase y me voy orgulloso de la clase. Me ducho, recojo mi taquilla, le doy un golpe en la puerta y de me despido hasta la próxima. En esa taquilla dejo muchos momentos, dudas, esfuerzo, decisiones, etc… Salgo con una sonrisa abierta ¡No es para menos!
No hay Mundial, es por la noche y pienso, ahora sí se acaba la excedencia ¡El lunes a trabajar! Reconozco que llevo una lucha interna fuerte, porque quiero hacer cosas nuevas y mi corazón me dice que adelante, que lo intente, pero mis miedos aparecen. he mejorado en cosas, aunque superar el miedo en este caso en el ámbito profesional me puede. No soy emprendedor, pero me gustan las cosas nuevas porque están llenas de oportunidades. Sinceramente tengo que darme oportunidades. Estos días en el colegio, creo que me dictaran más cosas. Bonita experiencia este año sabático, donde me he esforzado y aprendido muchísimo, sobre todo a ver las cosas de otra manera y valorar momentos y personas.
Tengo mucho para reflexionar, contar y escribir. Dejaré algo para mañana donde cerraré mi blog con mucho cariño.
Mañana más y mejor
«El tiempo es inagotable»
(Yo)